jueves, 31 de enero de 2013

SEGUNDA LECTURA


LA EDUCACION SOCIAL, INTERVENCION SOCIOEDUCATIVA, EN LA PROBLEMÁTICA DEL ABSENTISMO ESCOLAR.                                                                                 Luis Saéz, Saéz.

En la redacción de este artículo, el autor describe  la educación como un derecho innegable del estudiante,  sin embargo los alumnos entre 6 y los 16 años de edad, muchas veces  convierten  este derecho  en una obligación, transgrediendo  así a la educación y convirtiéndola en un factor de supresión social al generarse el absentismo y la asistencia irregular en la escuela, para ello es necesaria la intervención del profesor, tutor  y especialistas con la finalidad de concretarse en el desarrollo de un programa que incluya acciones preventivas, y de intervención, así como un seguimiento de la situación de los alumnos. es decir;  unir esfuerzos para dar respuesta a un problema educativo y social, esto con el propósito de que los alumnos se desarrollen plenamente y disminuyan conflictos en la sociedad.
Cabe señalar que la intervención socioeducativa  tanto del educador social, como el tutor, complementan la acción preventiva sobre el absentismo escolar, dado que  ambos ejercen funciones de  atención, acompañamiento, para intervenir en  la solución de un  problema específico y  evitar el riesgo de exclusión social generado por el absentismo escolar.
Particularmente el absentismo escolar, es un fenómeno que se extrae en todas las áreas de las grandes ciudades, pero se intensifica en aquellas donde existe un alto porcentaje de inmigrantes, minorías étnicas, familias desintegradas con un nivel de ingreso bajo.
Por ello la marginación, el desarraigo, la pobreza y la marginación,  son circunstancias que están presentes en determinadas capas de la sociedad. De este modo la intervención socioeducativa implica dar respuesta a un problema educativo al posibilitar o restablecer un desarrollo adecuado de los alumnos y de otra parte supone hacer frente al problema social derivado de esta situación.
Para ello es necesario buscar respuestas  ante una situación de desequilibrio en el que se encuentren algunos alumnos(as) dado por que la educación en su  familia y en su cultura se sustentan en principios y valores  diferentes a los que imperan en  el sistema educativo.
Causas de ausentismos y la desescolarización:
Es bien sabido que le absentismo escolar  representa un  problema multifactorial: educativo, personal y social provocado por diversas  factores mismos que se  explican a continuación:
1.- El entorno en el que vive el alumno.-  El comportamiento, actitudes y posicionamiento  colectivo y comunitario, puede influir  negativamente  en el  estudiante, para tomar una decisión equivocada  relacionada con el absentismo escolar.
 2.- La institución escolar.- Es frecuente escuchar que la institución  escolar no diseña planes de acción que contrarresten la problemática de absentismo, porque las acciones están dirigidas para las clases sociales acomodadas.
3.- La situación familiar.- Particularmente la precariedad económica, las condiciones deficientes de vivienda, las relaciones conflictivas con  la familia, el proteccionismo excesivo, el abandono o el maltrato físico, son  indicadores que  inciden en el problema de absentismo.
4.- El grupo de iguales.-  La falta de estímulo y atención familiar, provoca que  los alumnos busquen amigos con las mismas características trayendo consigo la integración de pandillas, así como otros problemas sociales,   volcándose estos en la falta de interés  por asistir a la escuela.
5.- El propio alumno-alumna.- El desinterés por estudiar engendra aburrimiento que se manifiesta en diversas formas: pasividad y exasperación, mezclándose en un destello de rebeldía, los trastornos de conducta, los embarazos no deseados.
6.- Otras cusas.- Cuando la cultura limita a las mujeres para  no estudiar considerando que ellas  deben ser preparadas para  cuidar y atender una familia.
De manera general la educación debe visualizarse con una disciplina que atienda necesidades socioeducativas para poder contribuir en el desarrollo de los individuos en la sociedad, además el (la)  educador (a)  social debe poseer  una serie de competencias para desempeñar funciones encaminadas a la intervención socioeducativa, entre ellas capacidad de análisis y síntesis, así como la solución de problemas, trabajo en equipo y adaptación y situaciones nuevas.  Entendiendo así que el (la) educador (a) social, a través de la mediación ha de  facilitar la comunicación entre los intereses del alumnado y las expectativas del profesorado, centrados en el proceso de  enseñanza-aprendizaje. Así mismo el proceso de mediación debe tener en cuenta los siguientes aspectos:
·         La aceptación de la persona y consiguientemente el profesional, con la finalidad de establecer la cercanía, empatía y afectividad.
·         Descubrir las necesidades  e intereses que se pretende alcanzar en un plazo determinado por ambas personas.
·         Fijar las relaciones con padres, tutores y alumnos.
Por otra parte la prevención del educador  social, debe  estar adaptada  en los factores que causan el  absentismo escolar, la situación familiar, el  entorno en el que vive. Asimismo el control del proceso de intervención contempla trámites y seguimiento de las instituciones implicadas,  considerando además las visitas domiciliarias para conocer los motivos de absentismo, acompañamiento al centro  donde ha sido canalizado el alumno, coordinación con la comunidad educativa de los centros escolares, motivación del alumno frente al estudio, seguimiento periódico de los casos de absentismo.
                Es decir la función de la  educación social, se centra en fomentar la participación de la infancia y adolescencia en situaciones de riesgo  y exclusión social, en actividades de carácter socioeducativa y en programas que incidan en el aprovechamiento del tiempo libre, para lograrlo es necesaria la intervención entre distintas instituciones implicadas  en el fenómeno de absentismo escolar.

PRIMERA LECTURA


EDUCAR PARA VIVIR Y VIVIR PARA EDUCAR

El presente resumen muestra  la importancia de  contribuir con los alumnos en la formación de valores, dado que es un tema transcendental para los estudiantes.

De acuerdo con lo que plantea el Dr Rugarcía  su libro: “El sentido del docente y sus consecuencias en la educación”, el docente debe tener vocación para educar, entendiendo éste como un acto de pasión donde debe buscar el cambio hacia las personas para  transformar la mente y el corazón, es decir debe existir una revolución que a través de una libre decisión genere procesos de construcción del sujeto. Sin embargo la situación real que se vive en el aula o el verdadero sentido de la educación está olvidada, de ahí la importancia de  formar en valores como única alternativa que puede rescatar al hombre,  se trata ante todo de un grito de rebeldía ante la  decadencia de la educación.
En este libro  Rugarcía, denuncia un sistema educativo que requiere urgentemente de que los docentes vuelvan la vista al verdadero fin  de la educación, al ser de la educación, es decir  volver a educar para vivir, para ello es necesario enseñar valores refiriéndose particularmente a propiciar que el alumno vaya descubriendo un método fiable para  clarificar,  asumir y vivir valores,  donde el camino implica que cada alumno vaya construyendo su propio vía, que exista comprensión de conocimientos, desarrolle habilidades con un pensamiento crítico y creativo, vivenciando las actitudes  acorde a los valores.
Derivado de lo anterior es conveniente analizar “El sentido docente y sus consecuencias en la Educación”.

En este capítulo el autor describe la resistencia al cambio por parte de los docentes, donde éstos manifiestan diversas posiciones negativas que  obstaculizan el crecimiento y desarrollo de los individuos entre  ellas se mencionan los siguientes argumentos:
·         Los programas educativos son extensos, es insuficiente el tiempo para abordar todos los contenidos.
·         Existe poca participación estudiantil
·         Los grupos son numerosos.
·         Vienen mal preparados  de las escuelas que los anteceden.

Como consecuencia de la problemática,  es necesario reflexionar sobre ésta labor. Una manera para entrar sobre el tema; es la reflexión pedagógica que está explícitamente después de cada acción educativa, para ello el autor aborda 3 enfoques:

1.-Enfoque centrado en la materia.- Donde el docente se centra en lo que debo enseñar, al mismo tiempo plantea estas interrogantes.
¿Qué tengo que enseñar?, ¿Qué tiene que saber el alumno?, ¿Cómo  lograr que  me pongan atención?.
En este enfoque el papel del profesor es cubrir el programa, cumplir con sus obligaciones de transmitir, informar, calificar y no para ver en el alumno otras aptitudes  que transciendan en la sociedad. Esta perspectiva responde al concepto de hombre incapaz de decidir, falto de iniciativa y creatividad.

2.-Enfoque centrado en el aprendizaje de los estudiantes.- Este enfoque  debe responder a satisfacer las necesidades que reclaman los estudiantes, por ejemplo:
¿Qué debo hacer para  adecuar el contenido a los intereses y necesidades de alumnos?, ¿Cómo despertar la necesidad por aprender?, ¿Cómo organizar al grupo para que los alumnos se comprometan  sobre su propio aprendizaje?

 El verdadero sentido de la relación docente es el aprendizaje del alumno. Se busca el auténtico aprendizaje significativo, y  el respeto por el estudiante al aceptar su grado de desarrollo, sus conocimientos, habilidades y actitudes (valores) partiendo de ello para educarlo. La conciencia de ser docente.  La apertura y disponibilidad para aceptar e ir descubriendo nuevas alternativas y caminos que promuevan  la actividad de enseñanza y aprendizaje.
El enfoque considera al hombre  como una persona en proceso de crecimiento, con el poder de crear y decidir, enfrentar sus  limitaciones y con capacidad de relación y compromiso.

3.-Enfoque centrado en lo social.- Como profesor es necesario abordar la materia  para que el estudiante pueda integrar la teoría con la práctica. Por ello es necesario plantear las siguientes interrogantes.

¿ De que manera el estudiante cuestiona su realidad social y encuentra elementos para actuar en ella?, ¿Como relacionar la historia académica y familiar de los estudiantes, como parte del proceso educativo?,  Tener conciencia desde donde se actúa y buscar alternativas de solución?.

El docente debe cooperar para el desarrollo y crecimiento, para asumir el compromiso de servir a la sociedad, de ahí la necesidad de que los estudiantes  exploren  contenidos para la solución de problemas, que en algún momento puedan enfrentar en el mundo real.  Sin embargo no de las grandes dificultades de las instituciones educativas, es que se pone en énfasis la lógica de la disciplina, dejando de lado a la persona que aprende, a la realidad social que nos rodea y al modo de actuar sobre ella. Asimismo en las estructuras curriculares, se vive una desvinculación entre el aprendizaje inscrito  en las instituciones y lo que en la realidad  exige para su acción transformadora.

Por ello Rugarcía propone una Alternativa  metodológica que consiste en revisar nuestra labor docente para darle otro sentido y tomar decisiones, para proponer lo más adecuado para el desarrollo integral de los estudiantes, y sobre todo ser humildes para aceptar que nuestro impacto en la sociedad es indirecto a través de los alumnos, en decir hay que educar al otro para que éste se encargue de transformar la sociedad.